COLOMBIA: Política Internacional enceguecida golpea por doquier

Cual en merienda de sordos, los funcionarios colombianos desde el Presidente Uribe, Ministro del Interior, de Defensa, Policía, Embajador en Ecuador, la Canciller, todos hablan, ninguno escucha, se contradicen, niegan lo del otro, qué vergüenza! Lo más grave de todo, sin embargo, es que se hace daño a los vecinos, pues una vez lanzado el puño y el golpe, ya no se los puede retirar. Qué probreza de política internacional la de Colombia, ganándose cada vez más enemigos por no proponer sus soluciones ni querer ver por sus propios ojos, sino a través de los de aquellos que la manipulan a través del torpe Uribe!
Con esto Uribe no solo muestra desprecio por Ecuador, sino por su propia gente a quien engaña, miente, muestra su dura cara, cuando por su sangre sólo corren intereses personales, de sus aliados y de su grupo de poder.

Escrito en Oct 2003, pero aun vigente: Ecuador es víctima del PLAN COLOMBIA

Es difícil permanecer inmutables ante esta enorme realidad: Colombia está tirando de las manos y Estados Unidos empujando por la espalda a Ecuador para lanzar a este país a una hoguera de la que no saldrá sino calcinado o con pronóstico reservado sobre su futuro. En 1998, Colombia hizo a EU una propuesta para alcanzar la paz basada en proyectos de desarrollo, pero el gobierno norteamericano le devolvió otra titulada "Proyecto para la paz, prosperidad y fortalecimiento del estado" basada en la lógica militar contra la guerrilla; desde la puesta en marcha del Plan Colombia, ese país ha visto aún más lejana la paz y prosperidad que pretendía el famoso plan. Pero no solo ellos están sufriendo, también Ecuador se ha visto ampliamente involucrado, basta mencionar algunos detalles:

1. Las fumigaciones afectan las plantaciones ecuatorianas y enferman a la gente; sin embargo, no se logra llegar a un acuerdo para detenerlas.

2. Los desplazados se cuentan por decenas de miles y existe poca capacidad para acogerlos en el país.

3. Los desplazados en su mayoría son gente que ha escapado con nada más que su ropa puesta, con muy pocos recursos. Pero no hay que olvidar que la gente que los acoge en Sucumbíos son incluso más pobres que los propios huéspedes; sin embargo, los desplazados al menos cuentan con ayuda humanitaria internacional, mientras que la gente local tiene casi nula asistencia del gobierno, creando de esta manera un lógico y peligroso desequilibrio social y una tendencia a actitudes xenófobas hacia los vecinos del norte.

4. Las acusaciones aún no comprobadas del presidente de Colombia y las supuestas ventas de armas manchan al país y sutilmente lo mimetizan y preparan para ingresar en el juego de la guerra.

5. EU, con su estilo tradicional de prepotencia, tiene casi listos los denominados "puestos de acopio" para ayuda humanitaria. A pesar de las afirmaciones de EU que estos puestos no tienen fines militares, estarán bajo la administración y operación del Comando Sur, que son militares estadounidenses que tienen como responsabilidad la seguridad de los intereses de EU en América Latina.

6. Y para qué mencionar la base de Manta, prácticamente una base militar norteamericana que les cayó del cielo luego de haber devuelto el Canal de Panamá. Así como en los "puestos de acopio", en la base de Manta nunca se conocerán los verdaderos objetivos -a menos que sea muy evidente pero quizá demasiado tarde- pues el país no tiene, ni de lejos, la tecnología suficiente para supervisar lo que realmente se trama bajo sus techos.

7. De acuerdo con el diario El Comercio, "todos los recursos son financiados por cinco oficinas de seguridad estadounidense, que se encuentran en el país: la Agregaduría de Defensa (DAO), la Agencia de Control y Fiscalización de Drogas (DEA), el Grupo Consultivo y de Ayuda Militar (MAAG), el Departamento de Seguridad Interna (DHS) y la Agencia Nacional de Seguridad de Estados Unidos (NAS)"

Habíamos visto de lejos como EU enviaba tropas y armamento a varios frentes alrededor del mundo, pero ahora están aquí, en casa, el país es prácticamente una sucursal militar norteamericana, ¿Pero qué ha tenido el país a cambio? Nada. Y ni siquiera estamos tratando de negociar algún beneficio importante.

Si EU desea ayudar realmente a Colombia ¿Por qué no lo hace directamente a través de territorio colombiano? Este caso no es como el de Irak o Afganistán donde tenía los gobiernos en contra; el presidente Uribe desea que le ayuden y existe un vasto territorio no ocupado por la guerrilla donde pueden estacionar las fuerzas norteamericanas.

Siendo las drogas la raíz del problema, ¿Por qué EU no hace lo más obvio, tratar de reducir su consumo doméstico? Aquí también rige la ley del mercado que tanto les gusta: si el consumo se reduce, la oferta baja, se abarata, genera menos recursos y debilita a los grupos que la manejan. Pero esto no se hace, pues tal vez es más barato y menos vergonzoso ir a ensuciar los patios ajenos antes que limpiar los jardines de su propia casa.

En medio de esta espantosa vorágine está nuestro pequeño país, como hoja al huracán, con muchísimas probabilidades de ser arrastrado. La llamada Isla de Paz hasta hace algunos años, será en poco tiempo un mar de violencia incontrolable – como ha sufrido Colombia por 50 años- a menos que tengamos la fortaleza para acogernos al derecho a decir...NO! a las imposiciones de Colombia y Estados Unidos.

COLOMBIA: ¿Hay realmente voluntad para terminar con la violencia?

Colombia ha luchado contra la guerrilla y el narcotráfico por más de cuatro décadas. En los últimos años incluso reforzó su ofensiva con el apoyo del país más poderoso del planeta. Los resultados, sin embargo, no aparecen, mas bien solo complican a los vecinos como Ecuador con las fumigaciones, incursiones armadas y hasta la muerte de civiles ecuatorianos.

Resulta bastante extraño que un belicoso hombre como Uribe, sus generales y USA no se hayan dado cuenta que una guerra no se gana con sobrevuelos civiles ni militares, sino con posicionamiento efectivo en tierra de soldados y civiles colombianos, con toda la infraestructura que ello requiere.

Sin querer decir que la extrema violencia es la solución al conflicto, uno se pregunta: si Colombia quiere realmente ganar esa guerra ¿Por qué no ejecuta junto con USA una incursión armada frontal total para que termine todo esto? ¿O acaso esa ineficacia es deliberada y se transforma en un pretexto para que USA tenga un laboratorio de pruebas para sus armas, mantener el mercado para las mismas o camuflar la búsqueda de otros objetivos estratégicos de los norteamericanos en la zona?

La actitud de Uribe con el pueblo colombiano y con Ecuador da más para despertar suspicacias que para ofrecer un apoyo encaminado a la búsqueda de paz.

COLOMBIA: de buen vecino a prepotente país

Historicamente, Colombia se ha caracterizado por ser un aliado nuestro en el contexto político y económico internacional. Han sido pocas las veces en que algunas discrepancias nos incomodaron, pero estas fueron resueltas mediante el diálogo franco y directo. Sin embargo, esa amabilidad ha desaparecido completamente desde que hemos tenido gobiernos que no miran más allá de sus viscerales intereses. Durante la época de Lucio Gutiérrez no se hizo nada al respecto, a pesar de que hubo choques violentos en algunos pueblos fronterizos e incursiones militares colombianas. El inepto canceiller  Zuquilanda no se dió jamás por aludido, tal es así que en el campo internacional no abrió su boca para pedir explicaciones del hundimiento de barcos ecuatorianos en manos de la armada de Estados Unidos, aún cuando el propio vocero de la embajada norteamericana confirmó los hundimientos. En la era Palacio algo cambió pero finalmente las acciones fueron débiles e ineficaces. En la actualidad, la tónica continúa con Colombia incursionando cada vez que quiere, matando ecuatorianos y negándose a dar explicaciones, a la vez que las indemnizaciones no han llegado oportunamente a los afectados ecuatorianos. Las fumigaciones son otro de los atropellos de Colombia; incluso llega a decir que son irreversibles (léase: lo haremos sin importar lo que diga Ecuador).
Con esa actitud de Colombia y la debilidad de nuestra política internacional, es difícil llegar a acuerdos mediante el diálogo. Lo que nos queda es esperar que el gobierno de Rafael Correa levante su voz con firmeza y decisión, caso contrario los vecinos del Norte junto con su aliado Norteamericano continuarán con el irrespeto a las fronteras, a la vida de nuestra gente y la naturaleza de nuestro Ecuador.